Autor:Eduardo Ruiz Vega
La radio es el medio con mayor penetración en México. Vivimos una época de desarrollo tecnológico, de redes multimedia como la Internet y, sin embargo, la mayoría de los mexicanos se informan y entretienen escuchando a la radio tradicional, el audio que se difunde a través del espectro radioeléctrico en AM o FM.
La importancia de la radio en la vida de los mexicanos es evidente. De ahí que cualquier proceso que afecte a esta actividad de interés público, con función social, normalmente genere revuelo en la opinión pública. La digitalización de la radio mexicana es un proceso de evolución tecnológica que debe orientarse al mejoramiento de la calidad en las emisiones y a un uso más eficiente del espectro radioeléctrico. Así de simple, así de sencillo.
Sin perjuicio de la sencillez conceptual de los efectos de la digitalización en las estaciones y sistemas de radio y televisión (digitalizar es mejorar, creo que no debería existir debate al respecto), existen aspectos diversos de políticas públicas que deben ser cuidadosamente analizados a efecto de que este proceso se realice de manera ordenada y, sobre todo, protegiendo a la audiencia.
Un reto importante, a la luz de la capacidad adquisitiva de la mayoría de los mexicanos, consiste en elegir un estándar que garantice calidad y economías de escala. Trato de explicarme: las tecnologías de radio digital aún están madurando, es necesario apostar pues el proceso no es inmediato sino gradual a una tecnología que asegure una mejora en la calidad de las transmisiones que se realizarán a futuro. Las economías de escala están relacionadas con el costo que tendrán los equipos de transmisión y de recepción, a efecto de que los mismos resulten accesibles para la población mexicana. Una radio que no puede ser escuchada debido al alto costo de los aparatos receptores, es una radio que no cumple con su función social.
Debido a lo anterior, los procesos de digitalización deben estar acompañados de un periodo de transmisión simultánea tanto en tecnología analógica, como digital. Al principio, las transmisiones digitales serán escuchadas por unos pocos. Al final, sucederá lo contrario (como se demuestra con el proceso de introducción de transmisiones en FM, respecto de la AM). La penetración de la tecnología digital se determina en función directa de la cobertura de las señales y del precio de los aparatos que tendrán que adquirir los radioescuchas.
En adición a lo anterior, la política de digitalización que adopte México, a través del órgano regulador, la Cofetel, debe atender la compleja situación financiera por la que atraviesa la mayoría de las radiodifusoras de AM del país. La AM, por la diferencia de calidad respecto de la FM, ha perdido audiencia y capacidad de comercialización de sus espacios. La digitalización debe ser un vehículo para que la radiodifusión de AM recupere competitividad mediante la mejora tecnológica. Otro asunto, igual de importante, pero ajeno al proceso de digitalización, consiste en mejorar los contenidos radiofónicos y garantizar la pluralidad de los mismos.
En este sentido, se está desarrollando una nueva forma de hacer radio de vocación social, la denominada "radio comunitaria". La distinción entre la verdadera radio comunitaria y la radio pública es que la primera es financiada por la comunidad radioescucha y no con recursos presupuestales. Es necesario promover el desarrollo de la radio comunitaria por los cauces legales, no mediante concepciones ajenas a la ley que generan acciones ilícitas de piratería.
Es necesario un pacto social, el concurso y compromiso de la sociedad y del Estado para encontrar los mecanismos que permitan el desarrollo legítimo de la radio comunitaria. El Estado, que no el gobierno, principalmente el Poder Legislativo, debe comprometerse al financiamiento de estos medios de información y expresión. Las comunidades deben respetar la ley.
La definición del estándar digital de la radio mexicana está en proceso y sumamente avanzado. La propuesta que en su momento genere el comité al cual han sido convocadas tanto la radio comercial como la radio de vocación social, será sometida al escrutinio de toda la sociedad a través del mecanismo de consulta pública que conduce la Comisión Federal de Mejora Regulatoria.
Mis sinceras felicitaciones a etcétera por su sexto aniversario.
eruiz@cft.gob.mx
1 comentario:
Se me hace muy cierto lo que se comenta en esta parte de Radio Digital. Si bien es imposible impedir el avance tecnológico en ramas como la radio, tenemos que estar muy concientes como productores que las nuevas tecnologías no estan al alcanze de todos. Tienen un costo monetario más alto, por lo que tiene un proceso más tardío para propagarse. Pero aún asi el proceso es inevitable tarde o temprano.
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